Así se llama la obra, sí, para la audición de composición del último año, en el 2011. El título fue puesto en joda, en un primer momento, pero luego, determinó el final de la obra, que incorpora un actor que pega unos gritos al final. La relación del título con la obra es la siguiente: todo el comienzo es una representación del malestar interno psicológico del que hace la pregunta, por la desdicha de vivir en una sociedad deprimente, contaminada, monótona, superficial, y básicamente, infeliz. Ese malestar se asienta, y surge luego como un enojo, como una disputa por algo superficial sin importancia (como es que alguien se niegue a pasarte el queso rallado), y en general, la obra es una reflexión sobre las discusiones entre las personas, que muchas veces surgen por motivos mundanos, pero que se basan en insatisfacciones más profundas. El final, entonces, es la reacción del que hace la pregunta. Es a la vez una joda, y todo lo opuesto, depende como se lo quiera ver. Toda la primera parte es la grabación en vivo de la audición (la obra es para conjunto de cuerdas). Luego, cuando comienza la parte rápida (una fuga), lo simulé con Sibelius, ya que en la audición quedó muy lento. En cuanto al estilo, intenta tomar algunas cosas de Debussy, la escala por tonos, texturas estáticas, en fin... Cabe agregar que en esa época yo estaba bastante encabronado, había abandonado la viola, entre otras cosas, me sentía como la mierda, y la parte del actor la hice yo, así que la voz que se escucha al final es la mía, que dice: "pasame el queso rallado!! que no entendés que la sopa de verduras va con queso rallado?! pasame el queso, antes que te tire esta silla por la cabeza!!!" ahí el actor levanta la silla como a punto de tirársela al público, y así termina la obra.... 

- Me pasas el queso rallado? - No.

Un trabajo de composición, del 2011, para orquesta de cámara (cuerdas, maderas, metales y percusion). Secuenciado con el Sibelius, medio pobre en sonido (dinámicas, crescencos), pero bueno, se aprecia... 

Federico Pantufla