SatChitAnanda

En el susurro del eterno presente,
allí donde el tiempo se desvanece,
una semilla descansa, dorada,
en el vientre fértil de la consciencia.

Sat: el ser que todo lo abarca,
raíces que buscan lo infinito,
un latido profundo, inmutable,
el eco del cosmos en lo más íntimo.

Chit: el pensamiento despierto,
la luz que danza en las sombras,
un río de formas y memorias,
tejiendo historias entre auroras.

Ananda: el néctar de lo eterno,
un canto que nace sin palabras,
la flor que brota en el silencio,
destello divino en almas olvidadas.

En este suelo, sueño y vigilia convergen,
lo irreal se disuelve como espuma,
y cada pétalo que el alma despliega
es un poema escrito por la luna.

SatChitAnanda, mantra de la vida,
la semilla que somos, en expansión,
un recordatorio del suelo infinito
donde florece la liberación.

888 PIOZ

Danza para Gaia

Bajo el abrazo eterno de tus montañas,
la música despierta secretos antiguos.
Gaia, madre de todo lo que respira,
tu latido es tambor, tu aliento es himno.

La hierba susurra mientras danzamos,
raíces que cantan bajo nuestros pasos,
y el fuego del suelo asciende en espirales,
pintando libertades en cielos dorados.

Catarsis es la lluvia que lava el pasado,
tu río, la sangre que calma el ansia,
y cada encuentro en tu vientre fértil
es un retorno a la verdad que nos llama.

Extáticos, somos hijos de tu abrazo,
nuestras lágrimas, tus mares de vida,
y en cada giro, la danza es plegaria
que une la carne al alma perdida.

Cuando la música cesa y llega el silencio,
queda el murmullo de lo eterno y sagrado:
Gaia, cuna, templo y hogar,
en tu libertad, siempre seremos sembrados.

777 GAIA

ATMAN

La danza es un suspiro del infinito,
subjetiva como la brisa en el abismo,
pies que dibujan senderos secretos,
un paso, un latido, un eco en el ritmo.

El cuerpo, un templo que canta al vacío,
fractales que giran en geometrías vivas,
cada giro, un destello de eternidad,
cada pausa, un reflejo de lo divino.

Atman, chispa oculta en el fuego sutil,
se refugia en el pecho del universo,
y al moverse, desvela lo inasible,
el alma como danza en versos dispersos.

Desde la consciencia que todo lo abarca,
la danza se observa, serena y plena,
un juego de sombras y luces eternas,
refugio donde lo eterno se enreda.

Somos fragmentos de un sueño infinito,
pies marcando el pulso de lo sagrado,
y en la danza, el alma recuerda su hogar,
un fractal donde el tiempo ha callado.

111 ATMAN

Cierra los ojos suavemente.
Siente cómo el aire alrededor te envuelve,
como si cada partícula estuviera cargada de un propósito sutil,
invisible, pero profundamente presente.

Respira hondo.
Imagina un prisma brillante frente a ti,
iridiscente, pulsante,
como si respirara los secretos del cosmos.
Con cada inhalación,
siente cómo sus colores se reflejan en ti,
envolviéndote en tonos que no tienen nombre,
pero que reconoces como parte de tu esencia.

Permite que este resplandor te guíe.
Cada paso que das en este espacio interior
es un rezo silencioso,
una invitación a recordar lo que siempre ha estado en ti.
Siente cómo tus pies dejan de pisar,
flotan, se convierten en viento,
en una chispa que danza con el fuego eterno.

Ahora imagina que te acercas al núcleo del cristal.
Es cálido, envolvente, y vibra con una frecuencia sutil.
El 999 danza en su interior,
un pulso que cierra y abre,
que transforma el pasado en semillas de renacimiento.
Cada latido del núcleo es una puerta,
un salto hacia el vasto océano del infinito.

Siente cómo tu cuerpo se mueve,
no con esfuerzo, sino con fluidez.
Cada giro es un fractal del universo,
cada gesto, un puente hacia lo sagrado.
Déjate llevar por este movimiento,
sin buscar, sin esperar,
solo dejando que el cristal te guíe.

Y en este espacio,
siente una energía suave y amorosa envolviéndote.
Es Venus, la amante del abismo,
una brisa que acaricia todo lo que eres
y lo que creías ser.
Déjala fundir lo mío y lo tuyo,
hasta que solo quede un reflejo,
un susurro de lo eterno.

Permite que este momento se asiente en ti.
Eres parte del cuarzo, del número, del movimiento,
del planeta y del Todo.
Todo vibra en un murmullo sereno,
donde lo que somos se recuerda,
y el silencio se convierte en verdad.

Cuando estés listo,
respira profundamente una vez más,
y siente cómo este aliento de cristal
se queda contigo,
latente, luminoso, eterno.
Abre los ojos con suavidad,
y lleva contigo la paz de este núcleo sagrado.

999 AURA QUARTZ

En un sol que se esconde tras velos dorados,
se inclina la tarde en un último abrazo,
y la luna despierta con ojos plateados,
deslumbrando la noche con su manto sagrado.

El cacao en el pecho, néctar divino,
abre caminos en nuestro destino,
y en cada sorbo la voz se estremece,
canta el alma, el espíritu crece.

Aire sutil, susurro en la piel,
lleva los cantos más allá del ayer,
donde el viento, en su danza celeste,
teje oraciones con hilos de fe.

Fuego que arde en la noche estrellada,
llama que danza en cada mirada,
que todo lo viejo regrese a la nada,
y en su calor nazca la palabra.

Tierra profunda, madre que espera,
recibe en su seno la danza sincera,
pies descalzos, raíces abiertas,
somos semillas de luz verdadera.

Agua que fluye en su canto secreto,
ríe en la espuma, reza en el eco,
lava memorias, renueva el tiempo,
somos susurros de un río eterno.

Éter, vacío que todo lo envuelve,
silencio que danza y nunca se pierde,
somos su esencia, su nota vibrante,
somos lo eterno, lo inabarcable.

¡Hare Krishna, Hare Ram!
resuena el kirtan en voces aladas,
somos el canto, la ofrenda, la llama,
luz de la luna en la noche sagrada.

Que cada sonido eleve el misterio,
que cada latido despierte el sendero,
hoy somos templo, eco y reflejo,
somos la danza, el pulso del cielo.

333  EUPHORIC ESSENCE: CELEBRATING LIFE WITH LOVE & JOY

NatyMendz DJ Andromeda
Nacida bajo el cielo de Bogotá | Radicada entre las estrellas de España desde 2017

Mi vida es un viaje sonoro, una danza entre lo terrenal y lo celestial. La música, para mí, es un lenguaje del alma, un espejo que refleja las mareas emocionales que atravesamos para despertar nuestro potencial en esta encarnación.

No soy solo DJ; soy una tejedora de atmósferas oníricas. Mis mezclas son rituales sonoros que acompañan movimientos libres, encuentros conscientes y viajes interiores. No pincho en discotecas; creo paisajes musicales para festivales, retiros y espacios terapéuticos donde el ritmo se convierte en medicina y la danza en un acto sagrado.

Fluyo entre Madrid y Santander, aunque mi esencia es nómada. Mis influencias abarcan un universo de géneros, pero mi corazón vibra especialmente con el techno, el house, el psytrance y la música medicina. Cada set es una fusión de pulsos electrónicos y ecos ancestrales, diseñados para que pierdas la noción del tiempo y encuentres tu centro.

Aquí, cada sonido es una estrella, cada mezcla una constelación, y tú, el viajero que se atreve a soñar despierto. ¿Te unes al viaje?

NatyMendz DJ Andromeda

Pinned to spotlight

Popular tracks