Llegué a casa
más confundido que muerto
Y atiné a gritar:
"¡No tengo voz en la garganta!"
Y era verdad
Cada segundo
era tortura
cada parpadeo
una eternidad
Y se prolongó tanto el pasado
que llegó hasta el presente
Y disparó en las piernas
al caballo del destino
y me pisó la cabeza con un gesto de humildad
que aprecié de inmediato
y lo tomé como un saludo.
Siembra en mi pecho
tus flores de plomo
tu jardín de rosas de cuchillos.

Dentro Una Noche

"El Canil"

A esta hora ya empiezan a correr
los perros de la jauría
como potros aullando, 
dueños del mundo desde su principio,
desde la carne fría y la sangre postiza
hasta las noches de Luna
y la lluvia de huesos.

Quién retuerce sus pensamientos
como señales de polvo
cuando el galgo no corre, 
camina,
y los astros en forma de sabuesos
persiguen la estrella del amanecer.
En este pueblo en el que triunfó la muerte,
y las parvadas de cuervos
son de humo
y los crematorios, nidos y criaderos
a los que van a cazar los perros.

Aquí se desata la violencia al avanzar
y tras dientes rabiosos
se esconden almas enamoradas del mundo
abarrotadas con el deseo
de ver su imagen en el lago reflejada.

Deja entonces que el cielo escoja 
su perro guardián,
que los cazadores lleven su compañía
y los ciegos desfilen con sus Lazarillos.
Así los hombres con mirada animal 
encontrarán sus dueños,
y el cielo de los pobres
brillará con suerte endemoniada
cual perro faldero
que regresa a la tumba de su amo
a desenterrar los huesos.

El Canil

"El Purgatorio Lleno de Milagros"

Los truenos interrumpen los susurros,
los árboles se distancian cuánto pueden,
y aquí estoy sentado yo,
intentando aprender del cielo
dónde ubicar en el pentagrama la clave de la lluvia.

Es esta casa, sobre esta calle,
bajo esta Luna, 
intercambiando secretos con los vecinos de abajo,
dándole golpes al piso de madera.

Estudiando el silencio
de entre todos los demás sonidos
que significan que algo vive.

Y pienso:
"disfrutemos del murmullo que suena sólo para nosotros
la sinfonía permitida de lo que está muriendo;
todo esto está por quebrarse,
y cuando la banda haya terminado de tocar
será momento de irnos para nosotros también".

Acto seguido, las nubes terminan
de lavarse sus ataduras,
y los autos y los árboles y la gente
se recomponen y recuperan el aliento,
listos para adentrarse otra vez
hacia la noche tibia, 
el purgatorio lleno de milagros.

Debe ser fácil para la lluvia vivir así,
redoblando y deteniéndose
ante la más mínima duda,
dejando que el tiempo la arrastre
y recibiendo su llanto del mar.

Pero no es tan sencillo para nosotros,
quienes estamos encadenados
a la libertad
y vivimos y morimos
mirando nuestra sombra 
bajo la montaña,
elegidos para interpretar un papel
que aún no está escrito,
cabalgando errantes
rumbo a la nada.

Oh, si tan solo pudiera ser como la lluvia,
volverme el testigo silencioso
de un mundo que desaparece
cada vez que se oyen truenos en la distancia.

El Purgatorio Lleno De Milagros

"La Balada de Stefano y la Masacre del Supermercado"

Era un domingo por la tarde
de esos en los que el sol arde
y no hay ni una paloma perdonada
por el calor

En San Martín, en una esquina,
a unas cuadras de la vía,
Stefano Ursino yacía,
nuestro héroe y salvador
Con pulmones de color marrón

El licor de menta retorciéndole los sesos
la fisura en los huesos
y la sangre en los labios
Se levantó y dio un bostezo
y cómo no tenía ni diez pesos
se dijo
"necesito guita para comprar más escabio"
Y sonaba Asspera en la radio

Encendió de una patada
su moto robada
y cruzó la General Paz
escupiéndole a los autos
Y lo condujo el destino 
hasta un supermercado chino
donde no le fiaron ni el vino
más rasca y más barato
Y Stefi les gritó "¡manga de gatos!"

Y salió a las puteadas 
dando golpes a la nada
mientras que juraba 
que habría retribución
Y perdiendo la conciencia 
entró en un trance de violencia
y volvió para romper con la cabeza
el mostrador

Se lanzó con destreza
sobre los productos de limpieza
y comenzó a partir 
con los codos los estantes

Los dueños, desesperados, 
lo atacaban de todos lados
pero no lo redujeron más que por un instante
y Stefi gritó escupiendo sangre

Se puso a derribar 
con la espalda las paredes
como si estuviera ante ustedes
el abogado de la destrucción
Y los ángeles oscuros,
con los miembros casi duros, 
se arrodillaron ante la violencia 
de su corazón
y me ayudaron a escribir esta canción

Una vecina había
llamado a la policía,
quienes se apresuraron con sus fierros y gas pimienta

Y un patrullero cubrió la puerta
y el móvil dio la alerta
de que había un desquiciado 
destruyendo el supermercado
y Stefi tomó más licor de menta

Y sabiéndose acorralado
se escondió en el fondo del supermercado
y con un vidrio afilado
tomó una empleada de rehén

Dijo
"vengan a buscarme
pero si intentan tocarme
le corto el cuello a esta empleada que aquí ven"

El tiempo se le acababa
y la policía avanzaba
y dijo "muchachos, este es el final"
Y sujetó por la cabeza
a la empleada, Teresa,
y le seccionó la yugular
con su cacho de cristal
Ya no había a dónde escapar

Y perdiendo la esperanza
se puso el vidrio en la panza
y se dejó caer hacia adelante

Pero hizo un mal movimiento
y perdió el conocimiento
cuando se dio la frente
contra un estante
Y se desplomó como un elefante

Y esa fue su historia
de la que ya no tiene memoria
luego de tantos años en un hospital mental
Sentenciado a veinte años
que sujeto tan extraño
todo por no tener
algo que tomar

Y desde los años noventa
no se vende más licor de menta.

La Balada De Stefano Y La Masacre Del Supermercado

"Lástima"

No te necesito imaginar,
hermano,
mi sombra de color y carne, 
mis pupilas de otros ojos,
mi silueta con vida,
no te necesito imaginar en el camino:
he dado en él por cuenta propia.

Toqué con los pies los entablados roídos,
remé con los ojos las mareas profundas,
todo para llegar quebrantado
a aquella luz expectante
que promete todo
lo que ya ha ocurrido.

Y vos, hermano,
como lástima embaucada en las estrellas,
supiste dilucidar un mundo
razonable y esférico
que aprisiona con los puños
a lo que ya no tiene vida.

Con qué fragilidad 
pones la retina entre las nubes,
aferrándote a la tierra, hermano,
al Sol de nuestra madre,
mientras que allá en la laguna
asoman los pájaros
todavía menguando
todavía en la tristeza.

Aquí muero yo aplastado entre tus manos,
como súplica que no es oída
por nadie más que por los sordos,
mientras aúllan las paredes 
y riñen los baldíos:
todos aquellos lugares 
en los que solíamos jugar;
toda la violencia aplicada
como lámparas al polvo,
como libélula que acecha el fuego
y se consume embelesada
de la gentil misericordia
que se tienen los niños.

No quiero silencio ni sollozos,
no quiero velarte ni perderte:
quiero aprender a usar los ojos para crear algo;
siempre creí que serías tú
quien me enseñaría a mirar.

Lástima

"Hemos Caído"

El otro día 
cuando me quedé solo 
en el banco sucio de una plaza
Escuché gritar las campanas de una Iglesia
y me recordó a aquello
de que nacemos y morimos del polvo.

¿De qué polvo estaré hecho yo?
¿Tierra?
¿Sal?
¿Ceniza?
¿Pimienta?

Entonces salió a la calle
un tipo predicando sobre la catástrofe del amor
y como todos debiéramos estar alerta
y tener en cuenta
que palpitar puede ser un grave error
"Intenten salvarse, chicos,
acá se acaba el verano del amor".

"Las bicicletas,
el poder de los descapotados,
la sangre acelerando por los dedos inquietos"

Y sí, muchachos,
todo está perdido.

El azul es un color que se tiñe
Las rosas ya no buscan los domingos
El cielo ya no quiere ser celeste
Ni siquiera las tormentas 
quieren ya llover
bajo nubes desamparadas
sobre techos de lata.

Abandónense ya a sus bosques de verano:
terminó la cacería,
el mar de amores se ahorcó en su cuarto,
la entrega llegó tarde,
el destino se quedó dormido,
tus ojos no fueron suficientes.

Hemos Caído

"Escupitajo en la ventana (para imitar a los celadores del sueño)"


Una garra se paseó por mi cama
en la mañana
por mi pecho y extrajo
sangre de verdad

No sangre imaginaria, de los sueños, 
de las nubes,
sangre que estuvo adentro mío
salió y fue algo espectacular

Una vieja Luna blanca tiritando
en la ventana
me dijo "qué estás haciendo
con el cuerpo que te dí"

Dije "ejerzo mi derecho de ser libre
de ser bueno,
y aunque me diste mi cuerpo,
no puedes arrepentirte, 
ahora me pertenece a mí"

"Y pretendo que las próximas Lunas que me encuentren
cuando haga mi trabajo
con furia y libertad
y pasión y masoquismo

Tengan que callar sus comentarios,
como tú no estás haciendo,
porque ya estamos todos grandes
y sé que puedo descuidar,
como me plazca,
de mí mismo"

Y escupí a la ventana
y la cerré con llave
para que se me olvidara
la visión de mi futuro
en la que solo vi bajo agua
tierra devastada
el silencio de animales,
hombres huérfanos de rumbo.

Pero hasta ahí llegó mi capacidad premonitoria
lo demás ya será historia
si es que se cumplen las promesas
y nos ahoga la tristeza
Y este cuerpo que robé a la Luna
quisiera acobardarse
ante tiranos que desde el fin del mundo
movieran con destreza
los hilos del mal y el bien
para provecho de la injuria

Y no bastara solo furia
para contrarrestar tanta pena,
habré fallado en mi cometido,
habré errado a la vena,
habré trocado un cuerpo
por otro siglo en silencio.

Escupitajo en la ventana (para imitar a los celadores del sueño)

Gracias Pappo por "Dios Devorador"
nos diste un tema mejor
"Sigue Girando" sigue sonando
¿y para cuándo esos derechos de autor?

Toda la vida soñé
saber de dónde salía
esa hermosa melodía
y ahora lo sé
Ese riff solo lo pudo hacer Riff

Gracias Pappo, nos diste una misión
me ayudaste a estar más cerca de Dios
Todo el mundo vino y todo el mundo se fue
¿y entonces qué quedó?

Un barrio sin movimiento,
un chico durmiendo, por favor,
sáquenlo de ahí
Que ya no toca la guitarra, 
solo es otra carga
pero algo tiene que sacarlo de sí
Tiene que salirse de sí
Gracias Pappo.

Gracias Pappo Por Dios Devorador

"Flores Tibias"

Esta noche huele a flores tibias y sangre
tengo hambre y no puedo dormir
Tienen mi cuerpo secándose al viento
hasta que se olviden de mí
Hoy estoy muerto, y todo es incierto,
desde que desaparecí

Mi miedo, tu furia, el amor
en tiempos de lluvia de balas y gas
Existen solo por error, 
y por error también acabarán
Y si la tormenta despierta, 
y se da cuenta de la atrocidad
Que arroje sus bombas sobre nuestra tierra
¿para qué quiero esta ciudad?

Quiero cuerdas con su nacimiento
y cuerdas con su funeral
Que Argentina se muera durmiendo
ya que no se quiere despertar

Cuerdas con las explosiones
y cuerdas con la radiación
Quiero ver tocar a la orquesta canciones
en la última puesta de sol
Quiero ver al cielo sangrar...

Música o ruido, qué importa
la última nota está por sonar

Y esta noche huele a cacería humana,
hermana, estás pudriendoté
En un patio enorme, en un pozo sin nombre
¿quién te puso ahí y por qué?
(yo sé)
El mundo no es nuevo y prefiero
no ser nada a ser parte de él
El mundo no es nuevo
pero debo quedarme
a ver qué puedo hacer

Quiero cuerdas con su sacrificio
y cuerdas con la enfermedad
Nuestra suerte salta al precipicio
tu suerte se abre a la mitad

Cuerdas con la extraña calma
que invade mi alma de pobre animal
¿Y te cuento una cosa?
¡La vida es hermosa!
Y no lo supe hasta el final

Música o ruido, qué importa,
la última nota está por sonar.

Flores Tibias [demo voz/piano]

"Sueño Deshidratado"

Te pasaste demasiado tiempo en tu mente
Irremediablemente viajando del placer al dolor
Te mojaste en la orilla
y esa arena amarilla
te devolvió un poco de color

Y yo tengo que cuidar mejor mi suerte
porque no llegué a verte
y sé que esta vez no hay perdón
Pasé por una calle de tierra
con la naturaleza en guerra
y la radio desde un balcón

No vi la señal
era un lugar oscuro
sin presente ni futuro
y me entré a desesperar

No hubo tiro de advertencia
acabé con tu paciencia
y desperté en la parte fría
del mar

Y lamento totalmente haberte arrastrado
a un sueño deshidratado
que nunca quise tener
Traté de pensar en nada
pero apareció tu cara
y ya no quiso desaparecer

Y no hay que cavar muy profundo,
enterrar el pasado es solo un segundo,
lo hace todo el tiempo todo el mundo
y te digo
el sol no deja de salir
Justo mientras mi casa se quema
creo que de pronto
entiendo el problema
miré demasiado dentro de mí

Pero ya que estás acá
y se congeló el tiempo
exploremos el momento
no sé cuánto va a durar

Por suerte dejé el agua
a la sombra de la almohada
la mañana me dirá lo que es real.

Patoivanfer