En enero de 1971, la incansable María Ester Grebe emprendió una expedición etnomusicológica a la localidad de Puerto Edén, en la remota isla Wellington, situada entre los fiordos de la Región de Magallanes, donde hacia fines de la década de 1930 se instaló una pequeña base de la Fuerza Aérea de Chile, en torno a la cual comenzaron a radicarse espontáneamente los miembros dispersos de la etnia Kawésqar, hasta ése entonces nómades marítimos especializados en la caza de lobos marinos. La sedentarización de su sociedad provocó profundos cambios sociales y culturales, llegando a temerse la inminente desaparición de este grupo, como ocurrió con los Selk'nam y Yámana del extremo austral chileno y argentino.
La expedición Grebe buscaba documentar el proceso de acelerada aculturación y asimilación cultural de la etnia Kawésqar por parte de la sociedad nacional, así como también intentar abordar el estudio de sus manifestaciones musicales en relación al contexto cultural del cual emanaron. Al respecto, Grebe consideraba que sus expresiones constituían uno de los testimonios de mayor antigüedad y arcaísmo de la humanidad, cuyas raíces se hunden en el tiempo de los orígenes del hombre americano y sus tempranos flujos migratorios (Grebe: 1974). De esta manera reconoció no sólo su valor antropológico para el conocimiento integral del hombre de nuestro continente, sino también su valor etnomusicológico como preciosa fuente de consulta para estudios comparativos ulteriores. Así mismo, apreció su valor en tanto expresión artística primigenia, en cuya simplicidad detectó aquel impulso estético elemental en el que aflora el carácter telúrico de su cosmovisión.
Con el fin de obtener nuevas versiones de las canciones registradas por la expedición de Coon y Medina, realizada en 1959; la Doctora Grebe llevó copia de éstas consigo para poder reproducirlas magnetofónicamente en la isla Wellington. La audición compartida con sus interlocutores estimuló en ellos el deseo de interpretar sus propias versiones, siendo pionera en la aplicación de técnicas y metodologías que hoy conocemos como restitución patrimonial y antropología compartida. De esta manera obtuvo un rico material comparativo y además constató la desaparición de algunas canciones registradas por la expedición anterior, señalando asertivamente su relación con la pérdida de su funcionalidad social en la vida de las nuevas generaciones, como efecto del acelerado proceso de aculturación experimentado durante el siglo XX. 
 
Esta compilación intenta continuar ése proceso de intercambio cultural iniciado entre la comunidad Kawésqar de Puerto Edén y María Ester Grebe, en un intento de compartir los archivos académicos y registros de investigación, restituyéndolos a la vida cultural del pueblo Kawésqar, como ocurrió en aquel verano del '71.

Mauricio Pineda Pertier

Un valioso complemento de estos materiales musicales es aportado por las numerosas entrevistas grabadas magnetofónicamente a cinco intérpretes principales de las canciones. En ellas, surgieron diversos datos empíricos relacionados con las funciones y significados de la música y sus textos. Al estar orientada dicha expedición de terreno por un propósito exploratorio, en su desarrollo primó el empleo de técnicas de observación y entrevistas inestructuradas y semiestructuradas, las cuales se proyectaron libremente a medida que surgían espontáneamente los indicadores de la propia realidad cultural.

María Ester Grebe Vicuña*

* En: La música alacalufe: aculturación y cambio estilístico. Revista Musical Chilena, Vol. 28, No. 126-1 (1974)

Canción del juego de la ronda

Canción del lobo fino

Canción de alegría

Canción de amor

Sobre audición de registros de Coon y Medina

Esta compilación recoge una serie de registros representativos del trabajo de campo que la etnomusicóloga María Ester Grebe Vicuña realizó a fines de la década de 1960 en torno a las tradiciones culturales de bailes chinos y canto campesino de la localidad de Las Palmas de la Quebrada de Alvarado, comunidad agrícola serrana emplazada en el margen sur del actual Parque Nacional La Campana, en la zona baja del valle del Aconcagua. Los registros de cantores de este rincón montañoso, así como de su baile chino liderado en dicha época por don Carlos Bernales, portento de la cultura campesina del lugar, sobresalen en su trabajo etnográfico y etnomusicológico. Esta edición viene a honrar entonces la memoria del respeto mutuo que existió entre don Carlos y la profesora Grebe, recogiendo el persistente registro de este cantor, sus familiares y otros cultores locales, así como del baile chino del lugar.

Investigación, ​Recopilación y Registro: María Ester Grebe Vicuña/ 
Compilación y Catalogación: Rafael Contreras Mühlenbrock, Daniel González Hernández/
Asistente de Investigación: Llara Kritzner Jackowski/ 
Conservación sonora y masterización: Alejandro Miranda Raposo/ Arte y Gráfica: Gráfika Diablo Rojo (DelaFuenteGálvez)/ 
Producción: Mauricio Pineda Pertier.

​Obra realizada con aportes de Etnomedia, el Archivo Etnográfico Audiovisual del Departamento de Antropología de la Universidad de Chile y financiada por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio mediante el Fondo para el Fomento de la Música Nacional nº 425877, convocatoria 2017.

Responsable: Mauricio Pineda Pertier.
Producido por Etnomedia, año 2018.

Bailes Chinos de Chile Central II (1968-1969)

10. Canto a lo alférez para despedir al Niño Dios. Carlos Bernales con el Baile de Las Palmas

05. Canto a lo alférez de don Carlos Bernales con baile de Las Palmas para  M. E. Grebe

Esta compilación evoca la experiencia del viaje etnográfico realizado por la profesora María Ester Grebe Vicuña a fines de la década de 1960 en el sector bajo del valle de Aconcagua, donde generó un interesante corpus etnomusicológico sobre fiestas de bailes chinos y música tradicional. En estos registros emerge la acción festiva y ritual de cofradías de músicos danzantes que se visitan y celebran, desplazándose a lo largo y ancho del territorio para articular relaciones en un espacio geográfico más amplio: sector costino de Puchuncaví, sector ribereño de Tabolango y Petorquita, serranías y valles de Olmué y Limache; espacio nuclear de estos bailes chinos centrinos en los siglos XIX y XX.
 
Obra realizada con aportes de Etnomedia, el Archivo Etnográfico Audiovisual del Departamento de Antropología de la Universidad de Chile y financiada por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes mediante Fondart nº 9669.

​Responsable: Mauricio Pineda Pertier.
Producido por Etnomedia, año 2016

Bailes Chinos de Chile Central (1968-1969)

Contrapunto de alféreces Luis Araos con Baile de Granizo yJuan Luis Tapia con Baile de Petorquita

Canto a lo alférez despedida al Niño Dios en calvario Don Carlos Bernales con el Baile Las Palmas

Notas de campo durante la procesión de Cay Cay

Presentación del Baile Chino de Cay Cay en su fiesta patronal

Conversación con Leonardo Herrera, pequeño flautero del Baile Chino de Cay Cay

Agradecimientos mutuos de Dra. Grebe con Granizo, su alférez Luis Araos y Benedicta de Rabanal

Conversación con el alférez don Luis Araos sobre la fabricación de flautas y tambores

Toque del Baile Chino de Granizo en casa de doña Benedicta de Rabanal, presidenta de la hermandad

Toques de todos los bailes chinos y palabras al cierre del III Encuentro Nacional de Bailes Chinos

Canto a lo alférez, por la sequía. Don Guillermo Villalón con el Baile Chino de Puchuncaví

Etnomedia

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