Trabajamos “sin la esperanza de ser escuchados, con la certeza de ser perseguidos pero fieles al compromiso que asumimos hace mucho de dar testimonio en momentos difíciles”.

Opinión | El predicador de la plaza

Ese día de enero había poesía en el aire. Había poesía en el abrazo de dos guerrilleros que sobrevivieron, en la catedral donde resucitaba Óscar Romero, en la música, en la voz de Santiago.

Opinión | Un epitafio para el FMLN

El mayor d'Aubuisson fue parte de la conspiración para asesinar a monseñor Romero, aunque el tirador lo puso un hijo del ex presidente Molina, dice el capitán Álvaro Saravia. 30 años después, él y otros de los involucrados reconstruyen aquellos días de tráfico de armas, de cocaína y de secuestros. Caído en desgracia, Saravia ha sido repartidor de pizzas, vendedor de carros usados y lavador de narcodinero. Ahora arde en el infierno que ayudó a prender aquellos días cuando matar "comunistas" era un deporte. Originalmente publicado el 22 de marzo, 2010.

El Faro archivo | Así matamos a monseñor Romero

No sé lo que significa esta historia, nunca conseguí entenderla. No sé si es trágica o feliz, si da esperanza o desconsuelo. Hoy me libro de ese zumbido y se las regalo para que, tal vez, ustedes sepan acomodarla mejor.

Opinión | Las flores del mediodía

Los diputados salientes aprovecharon la última sesión plenaria para dejar servida a la legislatura entrante el poder de cambiar la Constitución de manera expedita. Los diputados que comenzarán su mandato este 1 de mayo solo deben ratificar la reforma al artículo 248 que fue aprobada este lunes 29 de abril con 66 votos. Cuando eso ocurra, cualquier cambio a la Constitución podrá aprobarse de inmediato y sin la necesidad, como había sido hasta ahora, de esperar a que una nueva legislatura entrara en funciones y ratificara. En las filas de Nuevas Ideas ya se habla de permitir la reelección indefinida de Bukele.

Diputados de Bukele autorizan a la Asamblea entrante a modificar la Constitución a placer

Desde el jueves 2 de mayo, camiones del Ministerio de Obras Públicas están llegando al río Las Cañas, en el límite entre Soyapango e Ilopango, a depositar los restos de las históricas baldosas del Palacio Nacional que está siendo intervenido desde principios de abril. Mientras los ministerios de Obras Públicas y Cultura guardan silencio sobre el tipo de intervención en el palacio, expertos aseguran que ese trato es impropio y se están violando leyes de protección patrimonial.

Los restos del Palacio Nacional se botan en el río Las Cañas

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Los restos del Palacio Nacional se botan en el río Las Cañas

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