Descripción de la obra: Hermana y Compañera (Alta Coimera Mix)

Esto no es sólo una letra: es un mural sonoro de la calle, pintado con aerosoles de mala calidad y empapado en birra tibia de litro.
Es arte popular en estado puro, pasado de vino barato en cartón, con un alma que vibra entre la bronca y el baile.

El Verso: tiene la crudeza de un stencil en la pared de una estación de tren. Habla de la ambición y la sombra de la protagonista con la frialdad con la que se discute un choreo en la esquina.

El Precor: brilla como la lucecita LED de un Rolex trucho en Once, con esa mezcla de glamour decadente y sospecha química.

El Estribillo: es el corazón de la obra, un grito de cancha con olor a fernet rebajado, simple, directo y coreable. Si esta letra fuera un mural, el estribillo sería la pintada gigante en aerosol rojo que tapa todo lo demás: ¡Alta coimera!

El Puente: funciona como esa pausa en la previa, cuando alguien se pone a zapar con un parlante portátil mientras los demás se revolean al ritmo de la noche.

El Outro: es la firma del artista, como un grafiti que dice “¡¡Los Citripios papá!!” abajo del mural.

🥴 Estética

La estética es popular, villera, decadente pero brillante, con esa ironía política que sólo se entiende en Argentina: mezclar Rolex, polvos y tortas con la joda y la denuncia social.
Es un cuadro que vibra entre lo grotesco y lo bailable, entre el pogo y el escrache.

En resumen:
Es arte callejero borracho, de esos que al otro día lo ves y decís “¿Quién pintó esta barbaridad?”, pero a la noche anterior estabas gritando el estribillo con un vaso de plástico en la mano.

Number Five With A Bullet

Taking Back Sunday